Animales sociales, por Cristina Martínez Sánchez

El ser humano es un animal social y como tal está configurado y programado para vivir en sociedad, son muchos las agentes externos que inuyen y pueden condicionar su conducta y personalidad, pero en estas jornadas nos vamos a centrar en el principal agente socializador del ser humano, la familia.

Es desde el núcleo familiar, donde el individuo se educa, aprende a relacionarse con el entorno y donde adquiere valores, hábitos, etc. los cuales, con el tiempo, pasarán a formar parte de la vida del individuo y condicionarán su conducta. Un elemento importantísimo dentro de la relación familia – individuo, es la comunicación. Una buena comunicación entra padres e hijos, es la base para un adecuado desarrollo, supone un elevado nivel de conanza, un manejo claro de la información acerca de las drogas y situación frustrantes individuales y una respuesta más empática de algunas de las partes ante un problema de adicción.

Hay estudios que ponen de maniesto que la tasa de adicciones a las drogas y al alcohol es más frecuente en personas cuyas familias son disfuncionales, es decir, no son capaces de desarrollar un sentido de pertenencia al núcleo familiar, muestran incapacidad para manifestar responsabilidad y respeto por satisfacer las necesidades emocionales del individuo. Suelen ser personas que aún viviendo con su familia son solitarios y muy individualistas. De la misma manera que esta despreocupación por los hijos puede llevar a una persona a desarrollar una conducta adictiva, lo puede hacer una familia sobreprotectora, la cual obstaculiza el correcto desarrollo del individuo.

La buena comunicación, la enseñanza con ejemplos, la transmisión de valores morales, representan la forma más adecuada para evitar la aparición de una conducta adictiva. Saber que la familia te quiere y te respalda es de vital importancia, pero ya no sólo para evitar que caigan en el mundo de las drogas, si no que es parte fundamental en el proceso de rehabilitación en caso de que el individuo haya desarrollado una adicción a las drogas o al alcohol.